1. Aprende a delegar. Apuesta por tu equipo y delega en ellos. Hay un punto débil del emprendedor: delegar. En ese sentido, apuesta por dar responsabilidades reales.
2. Conviértete en un experto. Si sabes del tema sé un experto –es más fácil de lo que crees: procura colaborar con blogs y publicaciones del tema, habla en eventos, aporta sobre el tema en redes sociales o hasta escribe un eBook. Todas estas son grandes formas de conectar con los clientes.
3. Mantén el marcador. Trata de registrar la mayor cantidad de estadísticas útiles posibles. Así sabrás cómo le va al negocio. Revisa las áreas en las que puedes mejorar. El software de CRM es una gran herramienta para ello.
4. Invierte en la tecnología correcta. No importa el tamaño de tu negocio, este puede competir con uno de cualquier negocio si usas tecnologías como la nube que es flexible, escalable y al alcance de todos.
5. Comparte el testimonio. Si haces un buen trabajo permite que otros lo conozcan y aprendan de él. Pregúntales a tus clientes por retroalimentación y pide autorización para citarlos en tu sitio web.
6. ¡Fuera de aquí! Revisa si hay eventos como conferencias y seminarios que puedan ser relevantes para tu negocio. Los expertos pueden ayudarte y tus similares pueden intercambiar puntos de vista y experiencias.
7. Colabora con otros emprendedores. Busca a otras empresas en tu misma situación para crear alianzas en diversas áreas. ¿Para qué contratar a una empresa grande si puedes crecer a la par con otro emprendimiento igual que tú?
8. Queremos saber de ti. La sección ‘Acerca de nosotros’ es la página más importante de tu sitio. Necesitas una y que esta refleje la filosofía y el carácter de micro empresa de tu negocio.
9. ¡Engánchalos! Realiza estrategias de mercadotecnia que te permitan tener una relación estrecha con tus clientes para que regresen y recomienden tu trabajo. Analizar tus datos puede ser de gran ayuda.
10. Toma un respiro. Un emprendimiento es un trabajo difícil. A veces la mejor decisión es una pausa y reencender la llama de la pasión con tu negocio. Un mentor puede ser de gran ayuda en esos momentos.