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El Ballet Australiano realiza una pirueta de ensayo y coreografía su Pas de Teams

Ella mete el nudo bajo el listón en su tobillo, se mantiene en alto. El sol matutino se desliza a través de las persianas y la habitación se siente tranquila. Suena una nota, se dice una palabra y ella se eleva hacia el primer relevé de la clase.

Y luego el gato serpentea alrededor de sus piernas.

Este es el nuevo mundo de clases para el Ballet Australiano: el pianista en su casa, la Entrenadora de Ballet en la suya, y la bailarina que aleja de manera rápida al gato hacia el balcón.

Cuando las reglas de distanciamiento social tomaron efecto, el Ballet se trasladó de manera rápida hacia una nueva manera de operar: la realización diaria de una clase matutina desde Microsoft Teams.

No es lo mismo a estar en clase con otras bailarinas, donde la entrenadora de Ballet puede ver cada movimiento, pero es una forma de mantenerse conectados, de seguir en movimiento. También es una manera de estar en contacto con sus colegas que también realizan piruetas desde sus porches o sus cocinas.

Fiona Tonkin OAM, asociada artística y entrenadora principal en el Ballet Australiano, comenta, “Ha sido vital tener la capacidad de enseñar, entrenar y conectar con las bailarinas de manera remota; primero, en términos de acondicionamiento: hemos podido trabajar con cada bailarina para que mantengan un nivel básico de técnica que necesitan como bailarinas profesionales. Tener esta base ayudará a las bailarinas cuando regresen al estudio y al escenario.

Ballet Australiano
Amber Scott y Fiona Tonkin. Foto: Kate Longely

“Adicional a esto, el bienestar mental de nuestras bailarinas es de gran importancia. Este tiempo, durante COVID-19, ha sido una experiencia única para todos nosotros. Aunque hemos trabajado de manera remota, ha existido un esfuerzo bastante consciente para conectar con las bailarinas y para que se sientan conectadas entre ellas. A pesar del entorno desafiante, Teams ha permitido que las bailarinas mantengan un sentido de camaradería y de energía compartida.”

Para David Cooper, director de TI en el Ballet Australiano, se trata de una demostración de qué tan importante es la tecnología para cada empresa, y en particular durante tiempos desafiantes.

Él y su equipo de TI de cuatro personas proporcionan los sistemas de información necesarios para hasta 350 usuarios. Aunque la entrega de clases en línea es una adición más o menos nueva, el Ballet cuenta con sistemas en sitio para manejar sus operaciones, apoyar el boletaje, así como ejecutar un ERP, un CRM y un almacén de datos.

El Ballet utiliza Office 365 de manera extensa, una instancia en SharePoint llamada Peggy (nombrada así en honor de Dame Peggy van Praagh, la directora artística fundadora del Ballet), Stream y Planner, sólo por nombrar algunas. Ellos tratan de aprovechar todo lo que hay en el portafolio de Office 365. Cuenta con alrededor de 60 servidores virtuales y de respaldo, y DR, manejados en Azure. De acuerdo con Cooper, “Nuestro modelo es usar tecnología que ayude a impulsar los resultados del negocio. Atrás quedaron los días donde el equipo de tecnología era sólo un proveedor de servicio en el que brindas, y das soporte, a servidores e infraestructura”.

Ese enfoque de negocios garantizó que cuando golpeó el COVID-19, Cooper y su equipo fueran capaces de mover los servicios para apoyar a las bailarinas que ya no podían asistir a clases presenciales, y sin embargo, necesitaban asegurar que estuvieran comprometidas, conectadas entre ellas y listas para presentarse.

Cooper comenta que después de una reunión con todas las bailarinas, donde explicó cómo se usaría Teams, la compañía, de alrededor de 80 bailarinas, descargó el programa, lo instaló en sus dispositivos e inició sesión. “Las bailarinas lo entendieron en alrededor de 15 minutos, lo que fue increíble. Comenzaron a chatear entre ellas en esta reunión con Teams. Fue una manera fenomenal para que sintieran que cuidamos sus intereses, y la tecnología les puede ayudar a mantenerse conectadas”.

Del lado de Cooper, esto requirió un despliegue un poco acelerado de Microsoft Teams para apoyar las comunicaciones y la colaboración a través de la compañía, y asegurar que las bailarinas, las entrenadoras de ballet, así como el personal administrativo, entendieran toda la capacidad de Teams. Todos los que trabajarían desde casa por primera vez participaron en el entrenamiento en Teams.

“Cuando planeamos el proyecto, esperábamos que el 30 o 40 por ciento de la gente entraría al entrenamiento. Tuvimos un cien por ciento. Ya no utilizamos teléfonos móviles. Llamamos a la gente por Teams, chateamos. Pueden mirar a través de las conversaciones para recordar lo que buscaban. Encontraron que es una gran manera de mantener la colaboración y la conexión entre ellas”, comentó Cooper.

Los bailarines del Ballet Australiano entrenan desde casa

Llevar en línea a la danza

No es igual a estar en un estudio de ensayos, no habrá grand jetés en el garaje, pero las bailarinas, pianistas, y las entrenadoras de ballet han encontrado la manera de trabajar juntos en línea. Todos utilizan dispositivos diferentes para conectarse: smartphones, tabletas y laptops, y todos tienen diferente conectividad desde casa. Pero Teams cumple con un importante papel laboral y social, comentó Cooper.

Las bailarinas utilizan el chat de Teams para mantenerse en contacto entre ellas, y crearon un Teams para cocinar juntas a distancia.

Mientras tanto, el equipo de Cooper trabaja para mejorar la experiencia, “Hemos conseguido micrófonos profesionales de solapa para las entrenadoras de ballet, y ahora invertimos en cámaras de mejor calidad”. Y dado que cada clase es grabada en Teams, si se cae la conexión a internet de alguna bailarina, o el gato se vuelve un problema, pueden reproducirla después.

David McAllister, director artístico del Ballet Australiano, ha sido un entusiasta adoptante de Teams para conectar con la compañía. “Nos ha sorprendido cómo la tecnología y el ballet han trabajado en conjunto para permitir, de manera fluida, que nuestras bailarinas puedan continuar con la danza durante la pandemia. Ha sido maravilloso, hemos sido capaces de emular la estructura diaria, aunque de manera digital, a la que están acostumbradas nuestras bailarinas, con la clase de barre a las 10:30 cada mañana, seguida por sesiones de entrenamiento virtual y chats en video con nuestro equipo de Salud Artística para acondicionamiento, prevención de lesiones y rehabilitación”.

“Al estar conectados de esta forma con las bailarinas durante este tiempo, nuestro regreso al escenario será con un renovado vigor y habrá elementos de esto que serán integrados en la nueva normalidad, en cómo opera el Ballet Australiano”, comentó McAllister.

El Ballet también realiza educación remota a través de Microsoft Teams. El programa de educación y difusión del Ballet ofrece talleres para estudiantes de prescolar, primaria y secundaria, residencias creativas y presentaciones para escuelas, y ofrece desarrollo profesional para profesores y líderes comunitarios en Australia.

De acuerdo con Cooper, “Microsoft Teams ha sido muy flexible para permitirnos continuar con grandes iniciativas como esta, y utilizamos una Surface Hub como la tecnología desde la que transmitimos esto”.

Para mantener la conexión con audiencias y patrocinadores, el Ballet corre en línea su Temporada Digital, y Cooper predice que los cambios obligados por las restricciones de COVID-19, motivarán a la compañía a ver a la tecnología desde un lente nuevo en el futuro.

“Si observo a las artes escénicas a nivel global, hay compañías que han empezado a incursionar en la realidad virtual y en los escenarios virtuales. En definitiva, veo un fuerte impulso en la tecnología hacia el futuro”.

“Las personas han comenzado a pensar en cómo la tecnología puede ayudar a las artes escénicas en este tipo de escenario. Toco madera, y espero que sea la última vez que ocurre algo como el COVID-19, pero creo que la gente buscará diferentes maneras de adoptar la tecnología y entregar contenido para los clientes y para sus patrocinadores. Un día, me encantaría poder caminar hacia un teatro virtual y ver una presentación de ballet. Creo que vamos a comenzar a ver mucha más experimentación en este ámbito”.

El Ballet Australiano