Seattle Seahawks utilizan datos y ciencias del deporte para ayudar a los jugadores a trabajar tan fuerte en su recuperación como lo hacen en el campo de juego
DeShawn Shead vive para esos momentos en los que puede provocar un balón suelto, arrebatarle el balón al mariscal de campo o conseguir una intercepción.
“Es una de las razones por las que juego”, comenta el esquinero de 28 años de los Seattle Seahawks. “Me encanta ver los frutos del fuerte trabajo que realizo”.
No ha podido hacer nada de esto por un año debido a una ruptura del ligamento cruzado anterior (LCA) y a una lesión en los meniscos sufridas durante la derrota de Seattle por 36 a 20 en el juego de la ronda divisional frente a los Atlanta Falcons en enero de 2017, pero ya está casi listo para regresar al campo. De hecho, ya ha regresado a las prácticas. La ciencia – ciencia del deporte y la tecnología le han ayudado a conseguirlo.
Bajo las órdenes del entrenador Pete Carroll, cada día de la semana tiene un tema diferente para los Seahawks: Lunes de Decir la Verdad, Miércoles de Competencia, Jueves de No Perder el Balón, y Viernes de No Repetir los Errores.
Revisan los videos de los juegos, dan todo de sí durante las prácticas, se enfocan en quitar y proteger el balón, y ejecutan jugadas de manera tan perfecta que sólo necesitan hacerlo una vez.
Y todo está unido por un mantra que resuena a través de toda la organización: “Hazlo mejor de lo que antes se haya hecho”.
Para Dean Riddle, científico de deportes aplicados de los Seahawks, esto significa ser capaz de aplicar datos y metodología de punta para ayudar a los atletas a conseguir su máximo potencial.
“Creemos que realizamos un trabajo en verdad importante para nuestros jugadores, al brindarles información crítica que llega a tiempo para que tengan la mejor oportunidad posible de brillar”, comenta. “Al utilizar tecnología para ayudar a los jugadores a maximizar su salud y preparación, son capaces de salir al campo para alcanzar su máximo potencial”.
Ha sido un largo camino de las bases de datos básicas de SQL y los discos flexibles que él utilizaba hace 20 años, cuando el neozelandés ayudaba a monitorear el entrenamiento de equipos profesionales de rugby, criquet y futbol soccer en el Reino Unido. Pero esos trucos arraigados grabaron valiosa información y llevaron a resultados productivos. Le ayudaron a evolucionar en un científico moderno de datos.
Avanzamos unas cuantas décadas y Riddle ahora trabaja con Sports Perfomance Platform de Microsoft, una plataforma de analítica predictiva impulsada por datos que aprovecha el poder de la nube de Microsoft con tecnologías avanzadas de aprendizaje automático, capacidades de inteligencia artificial y visualización de datos.
“Contar con ese espacio creativo y una naturaleza relajada dentro de un ambiente con una alta presión permite tener un pensamiento innovador”, menciona Riddle. “Se trata de esta mentalidad de buscar de manera continua maneras de desenterrar las cosas que necesitamos saber más a profundidad para que podamos ayudar a los atletas a que sean tan buenos como sea posible en un juego, y en las semanas que llevan a esa fecha. Tenemos permitido innovar, pensar de manera libre y buscar las mejores prácticas de otros eventos deportivos y luego llegar con toda la creatividad para encontrar la mejor manera de aplicarla al futbol americano”.
Él y los otros científicos del deporte del equipo pueden decir – por posición – cómo luce una carga normal de práctica. A partir de ahí, ellos pueden evaluar lo que cae de manera significativa sobre eso, y lo que cae por debajo. Los jugadores que participan de manera voluntaria en el programa de ciencias del deporte utilizan un dispositivo “GPS” entre sus hombreras durante las prácticas que mide sus movimientos a través de un giroscopio, un magnetómetro y un acelerómetro triaxial.
“Para informar la ruta a seguir para la rehabilitación, uno busca mediciones confiables”, menciona Riddle. “Por ejemplo, en la etapa actual de la rehabilitación de DeShawn, somos capaces de utilizar datos para comparar el siguiente periodo de tratamiento inicial después de la cirugía hasta la etapa en la que corre en el campo y trata de realizar cosas específicas del deporte. Luego, podemos monitorearlo con diferentes tecnologías para que sus entrenadores puedan entender, cómo se ve ahora en comparación con el día anterior, conocimiento basado en los datos de su progreso y en cuando ha alcanzado la meta planteada de estar en forma por completo y listo para un juego”.
“Soy un convencido de crear un ambiente y las oportunidades para que los atletas consigan su máximo nivel”, comenta Sam Ramsden, director de salud y desempeño del jugador para los Seahawks. Él estableció el departamento de ciencia del deporte hace seis años. “El entrenador Carroll quería traer algo nuevo y diferente a los Seahawks, un territorio de desempeño que no hubiera sido explorado en sus jugadores. No se trata de una cuestión de X o Y, estrategia o reuniones, se trata de lo que hacen los jugadores para estar listos por ellos mismos para jugar. La preparación viene cuando los jugadores comienzan a enfocarse en la importancia de la toma de decisiones impulsada por datos para maximizar el desempeño. Cómo comen, cuánto duermen, cómo piensan e incluso cómo se mueven”.
Esto significa estar a su nivel, trabajar con jugadores y entrenadores para llevarles información de valor, sin sobrecargarlos, ayudarles a tomar decisiones más inteligentes cuando se trata de recuperación y rehabilitación. Pero esto también ayuda cuando están sanos, para mantener mediciones precisas de su mejor jugada para que puedan trabajar sobre esas bases.
“Asimilamos el compromiso del entrenador Carroll con la creatividad, la pasión y el entusiasmo”, menciona Ramsden. “Y eso nos ayuda a derribar barreras. Todo es posible”.
Los jugadores también reportan por sí mismos cómo se sienten y cuanto durmieron a través de cuestionarios diarios realizados en tabletas Microsoft Surface fuera de sus vestidores que utilizan reconocimiento facial para iniciar sesión.
“Les puedo comentar de algunos casos donde utilizamos tecnología para rastrear a un individuo particular y vimos un declive en sus momentos explosivos”, comenta Ramsden. “Nos acercamos al jugador y le preguntamos, ‘¿Qué sucede?’ y él nos comentó, ‘Siento tensa la parte posterior del muslo’. Así que respondimos, ‘Bueno, por qué no le comentamos a tu entrenador sobre esto. Ve a la sala de entrenamiento atlético, que te traten la pierna y asegúrate que no haya una lesión. Pero regresemos contigo. Tengamos un poco de terapia para esto y veamos si podemos hacer que regreses’. Y por supuesto que conseguimos que regresara. Y ese jugador volvió a ser el mismo sin ningún problema. Así que, creo que es un gran ejemplo de utilizar la información y aplicarla a nuestros jugadores”.
La recuperación es el área de crecimiento más grande del programa, comenta Ramsden. En el pasado, dependían de la “prueba de vista” para ver si los jugadores regresaban a la normalidad. Pero ahora, con los datos saben cuán llegan a las marcas necesarias para regresar a jugar.
Luego, pueden utilizar esa información durante la etapa de rehabilitación para que los jugadores puedan recuperarse más rápido.
“Ahora, digamos de manera generalizada, que vemos algunos indicadores de bienestar, cargas corporales y algunos movimientos explosivos que no habíamos visto antes. Tenemos algunos límites integrados que nos permiten ver si algo es verde o no, lo que es normal. Tenemos un límite, y cuando llegas a él o lo excedes, vas a rojo”, explica Ramsden. “Si tenemos mucho rojo a través del tablero, ofensiva o defensiva, por posición, podemos hacer una recomendación al entrenador, y decir, ‘Esta podría ser una buena semana para dar un paso atrás. Tienes muchos jugadores en rojo, a la ofensiva y a la defensiva’. O, ‘Mira, da un vistazo. Tus receptores abiertos están en problemas. ¿Cómo Podemos ayudarlos esta semana en la práctica?’ Todo esto para que tengas un enfoque individual, o para que tengas un enfoque con una amplitud que abarque a todo el equipo”.
“Ellos quieren estar informados, estar involucrados a fondo”, menciona Riddle. “Entender los números es parte del proceso. Todos estamos juntos en esto. Esa es la forma en la que trabajan los Seahawks”.
Fuera del campo, han podido aprovechar otras tecnologías Microsoft para la administración de las funciones de negocio de la organización.
“Antes éramos muy tradicionales y utilizábamos tecnología que ya había sido probada. Pero ahora, somos proactivos, con curiosidad para utilizar nuevas tecnologías”, comenta Chip Suttles, vicepresidente de tecnología de los Seahawks. “Podemos utilizar la nube para abrir soluciones”. Por ejemplo, utilizar Azure para almacenar datos, ha sido una enorme fuente de ahorros para el equipo, y una manera de estar cercanos a tener reportes en tiempo real con Power BI.
“Creo que toda la idea de la tecnología y el deporte es emocionante para mí porque está en constante cambio”, comenta, “Ningún día es igual al anterior y yo sólo disfruto tratar de encontrar soluciones que cumplan las necesidades de nuestras operaciones y nuestros negocios y mejoren la experiencia de los fanáticos en el estadio”.
Suttles comenta que los Seahawks fueron la primera organización en mover su Outlook a Office 365 como un caso de prueba para la liga. Él menciona que tuvo un gran éxito, y que han encontrado grandes beneficios en ser capaces de crear un ambiente móvil para sus empleados.
“Las nuevas herramientas como estar en la plataforma de Office 365 nos ayudaron a encontrar soluciones aquí mismo, contra ir a buscar proveedores de terceros”, comenta Suttles. “Por ejemplo, acabamos de presentar y adoptar la nueva versión de SharePoint en Office 365, lo que ha permitido a departamentos como Recursos Humanos a ser capaces de dar soporte a nuestros empleados en nuestras instalaciones y en nuestro estadio desde la misma plataforma”.
Los Seahawks gestionan las relaciones con clientes y todo el ciclo de vida de patrocinios, habitaciones, boletos y contratos con Microsoft Dynamics 365. Con este enfoque más eficiente, el equipo va en camino de migrar el uso de contratos físicos y hojas de cálculo de Excel para manejar estas relaciones.
Las aplicaciones de Dynamics 365 administran la vasta base de datos de dueños de boletos para la temporada del equipo, para ayudar al equipo a gestionar más de 127 juegos consecutivos con boletaje agotado. El sistema también ha ayudado a los Seahawks con la lealtad de los fanáticos, lo que ha permitido mantener una tasa actual de renovación de 99 por ciento – por cuatro años consecutivos – y manejar una lista de espera por boletos de temporada de 12 mil.
Al final del día, las aplicaciones de negocios de Microsoft ayudan a brindar mejores experiencias para su base de fanáticos. La experiencia de los Seahawks en un día de juego estuvo en la primera posición de la NFL en 2016. Después de cada juego, la liga encuesta a miles de fanáticos para conocer su opinión de la experiencia en un día de juego, que incluye el proceso de llegada y salida del estadio, la experiencia de servicios para el asistente, sensación de seguridad, calidad y variedad de alimentos y bebidas, y la experiencia del juego en general.
De regreso al campo, ayudar a que los jugadores y entrenadores se convenzan del sistema de la ciencia del deporte se basa en que los científicos del deporte del equipo sean capaces de mostrarles los datos de manera rápida, a través de las opciones de visualización de Power BI. Así, pueden comparar de diferentes días de manera sencilla, y mostrar progresos o declives en áreas muy específicas.
“La información debe ser digerible para jugadores y entrenadores, para que puedan depender de ella”, menciona Ramsden. “Queremos que el jugador pueda revisar una visualización de Power BI y luego cambiarla en el camino, claro, pero ¿Qué había pasado cuando esto me pasó a mí?, agrega Riddle. “Queremos que tengan esa experiencia, y estamos muy cerca de conseguirlo, por eso son tiempos tan emocionantes. Nuestra asociación con Microsoft nos ha permitido construir estas sólidas bases para que podamos dar el salto hacia una nueva generación de atletas que están conectados de manera profunda y a diario, con su propio desempeño.
Otra cosa que ayuda al staff a entender los beneficios del programa son sus cinco elementos: STEMS, que significan, por sus siglas en inglés, Sueño y recuperación (Sleep and recovery), Pensamiento (Thinking), Alimentación (Eating), Movimientos (Moving [movements]) y Percepción (Sensing [vision training]). Al entender que no todas las personas en el equipo quieren mejorar en cada una de estas cosas, el equipo de ciencias del deporte es capaz de ajustar su programa para cada jugador y para lo que quieran mejorar.
Uno de los creyentes del programa es Shead. Cuando el “Esquinero más Destacado” de la Universidad Estatal de Portland se unió a los Seahawks en 2012, se sintió cómo con la mentalidad del equipo.
“Este equipo tiene mentalidad de campeón. Este equipo trata cada juego como si se jugara el campeonato. Cada juego importa”, comenta. “Uno confía en la preparación, en el tiempo que ponemos en estudiar, ejercitarnos, lo que ponemos en nuestros cuerpos. La clave es mantenerse consistente. Para el momento que llega el día del juego, hemos hecho demasiado”.
Aunque no ha estado en el campo con sus compañeros esta temporada, él ha puesto el mismo esfuerzo en su recuperación como si estuviera allá afuera con ellos.
“Cada día, busco el lado positivo», menciona Shead, que comenzó a jugar futbol americano en el sexto grado para los Tigres de Palmdale con sus hermanos mayores, en el sur de California. “Veo a mis compañeros jugar y practicar, y quiero regresar ahí. Siento que regresaré mejor”.
Shead se autonombra un “tipo de ciencias” que ama los números. Le gusta tener la posibilidad de dar seguimiento a su progreso. Sus “pasos pequeños” han incluido aprender a caminar otra vez después de la cirugía, a trotar, luego correr y ahora, realizar carreras cortas.
“Referente a DeShawn, hemos podido utilizar un enfoque organizacional en lugar de la opinión de una persona. Hemos recolectados datos a través de toda su rehabilitación, después de regresar de su lesión de rodilla. Tomamos esos datos y los comparamos con sus compañeros de posición”, comenta Ramsden. “También podemos hacer la comparación contra él mismo y creo que cuando cuentas con todo eso, además, cuando puedes ver de una manera gráfica, que tal vez exista una pequeña dificultad, puedes razonar sobre ella. Ya no adivinamos. Contamos con los profesionales aquí mismo para hacer frente a esa dificultad que vemos, porque hay datos que sugieren que él tal vez no pueda dar fuerza a esa pierna tan bien como lo haría para la otra, por ejemplo”.
La tecnología de ciencias del deporte le brinda a Shead la posibilidad de ver la diferencia en poder entre sus dos piernas, y entre la fuerza de su músculo y su aductor. Con esta información, sus entrenadores pueden recomendar planes de tratamiento, como más o menos repeticiones en áreas específicas, que le ayudan a recuperarse de mejor manera.
“Contar con estas tecnologías y aplicarlas en la rehabilitación ha sido increíble para mí, porque tengo algo con qué evaluar y poder avanzar. Me encantan los números, así que cuando veo que una pierna es más fuerte que la otra, eso significa que tengo que hacer un poco más de repeticiones con una de ellas”, menciona Shead. “Creo que esta información es una gran herramienta en la rehabilitación, que me ayuda a guiarme para poder regresar al campo”.
Cuando asiste al departamento de ciencias del deporte, pasa por un puñado de máquinas que prueban la coordinación entre sus ojos y sus manos (que parece un videojuego), así como qué tan alto y rápido puede saltar sobre cada pie.
“El proceso es un reto, y yo amo los retos”, finaliza Shead.