Una vista desde las alturas: La razón por la que Jessica Hawk, innovadora tecnológica, tiene su cabeza en las nubes
Antes de cofundar su compañía de tecnología, Jessica Hawk, que entonces tenía 10 años, consiguió una computadora para catalogar la gigantesca colección de maquillaje que su abuela le dio. Años después, cuando se unió a Associated Press justo después de la universidad, la innegable pasión por la tecnología y los datos le permitieron ascender de manera rápida, desde llevar sándwiches a entrenar periodistas para que utilizaran el más reciente software de archivado de noticias de Microsoft Windows.
Algunos años y cientos de clases de entrenamiento después, ella dejó el periodismo para crear Capax Global, una compañía que aprovecha la tecnología Microsoft para construir soluciones personalizadas para negocios alrededor del mundo, y enfrentar proyectos de datos que tomaban años y entregar resultados en tan solo semanas.
Cuando se lanzó la compañía a principios de los dos miles, los líderes de negocio se alejaban de los acuerdos de licenciamiento de modelo único y requerían soluciones tecnológicas más sofisticadas y personalizadas. Capax Global estaba ahí para brindar justo eso, y la compañía creció de manera rápida para satisfacer la demanda.
Aunque la compañía trabajó en un amplio rango de servicios, con el paso de los años Hawk y los miembros de su mesa directiva notaron que los empleados se sentían emocionados por trabajar con los servicios de nube de Microsoft Azure. Así que en 2015, dieron el salto para enfocarse sólo en Azure, un movimiento que Hawk comenta “exigió algo de valor”, pero que ha permitido a la compañía ampliar su foco y desarrollar una experiencia más profunda.
Durante la conferencia Microsoft Inspire 2018, conversamos con Hawk, a punto de cumplir 40, para platicar sobre su decisión de apostar todo a la nube, cómo sus antecedentes como periodista aún ejercen influencia en ella, y qué significa ser una buena líder.
TRANSFORM: Hace solo unos años, Capax era una compañía muy diferente. ¿Qué inspiró esa transformación?
HAWK: En 2015, reiniciamos el negocio, lo llamo reimaginar. Para ese tiempo ya éramos bastante grandes, alrededor de mil personas, y Microsoft [Azure] Stack era un componente de esto pero para ser honesta no era el más grande. Sin embargo, vimos que nuestros equipos estaban muy emocionados por trabajar en esos proyectos, así que decidimos dar un salto de fe y desligamos todas las partes de nuestro negocio que no estuvieran relacionadas con Microsoft era una combinación de involucramiento de empleados y, en ese entonces, los clientes estaban emocionados acerca de la analítica y lo significativa y real que se volvía la IA en su ambiente.
TRANSFORM: Capax se identifica a sí misma como una rebelde intelectual. ¿Qué significa esto, y cómo se refleja esa mentalidad en la compañía?
HAWK: Ir tras un problema de una manera única e innovadora requiere un poco de pensamiento individual, así que ‘rebelde’ es la capacidad de ver una oportunidad que otros tal vez no vean y no sentir que tienes que hacer las cosas como se hacían antes. Nuestros empleados tienen el respaldo para tomar decisiones creativas. Los impulsamos a estudiar el problema.
TRANSFORM: Te graduaste en historia, y comenzaste tu carrera profesional en periodismo. ¿Cómo fue que terminaste en la industria tecnológica?
HAWK: Cuando la [computadora] Apple IIGS salió, yo tenía alrededor de 10 años. Mi abuela me regalaba cada año enormes kits de maquilla para Navidad, así que tenía un gran botín de maquillaje, tal vez 300. Así que la primer cosa que hice cuando recibí esa IIGS fue construir un pequeño inventario de mi maquillaje. Tenía que pensar de manera detenida, “Bueno, tengo diferentes tipos de maquillaje así que debería tener una categoría de labiales y una de sombras para ojos. Luego hay diferentes atributos: color, duración…”
Así que construí por mi cuenta un modelo de datos de mi maquillaje a los 10 años. Me encantaba trabajar con computadoras. Cuando fui a la Universidad de Virginia, mis padres dijeron que buscara una carrera de artes liberales porque, “es la última oportunidad que tendrás de aprender cómo comunicarte con el mundo, y nada es más importante que una buena comunicación”. Pero todavía me gustaban las computadoras y comencé a tomar clases de ciencias de la computación y me fue bastante bien en ellas.
Pero mis padres tenían razón, como siempre. Todavía creo que la gente con antecedentes técnicos en ocasiones tiene problemas en la forma en que comunican lo que sucede. Ese tiempo extra que pasé en aprender cómo comunicarme en verdad me ha ayudado a desglosar el trabajo en un entendimiento sin tecnicismos, algo que es muy importante. Al final del día sí todo son ceros y unos, nadie va a estar contento.
TRANSFORM: Acerca de tu carrera, ¿Cuál ha sido la lección más importante que has aprendido?
HAWK: De lo que más me gusta hablar es sobre cómo trabajar con un equipo. Cuando comencé, estaba tan enfocada en los resultados que había perdido la oportunidad de obtener aún más resultados si hubiera entendido mejor en ese entonces que se trata más acerca de impulsar a tu equipo y asegurarte que entienden que los vas a apoyar incluso si llegan a fallar. ¡Porque van a fallar! Manejé un equipo cuando tenía 29 y para ese entonces alguien me ayudó a entender que es más importante construir esa camaradería y fomentar el sentido común de tratar de conseguir los resultados.
Veo a los jóvenes que llegan a la compañía con esos mismos titubeos y trato de trabajar con ellos para que entiendan que hay un resultado mucho mejor si te detienes un momento y trabajas con el equipo de una manera que los puedas impulsar.
Jessica Hawk, COO y socia de Capax Global, en una charla con el equipo de liderazgo técnico de Capax en sus oficinas de Chicago. (Foto cortesía de Capax Global)