Todo comenzó cuando Héctor Álvarez visitó a su amiga Paty Lucero en Bolivia, compró algunos gorros de lana hechos y mano y los usó camino de regreso a casa en Lausana, Suiza. Cuando la gente le preguntó dónde había conseguido esos coloridos gorros, los amigos tuvieron una inspiración.
Pensaron: ¿Por qué no empezar una compañía para ayudar a los fabricantes de gorros y a los tantos niños que vieron que buscan ganar dinero en las calles?
En 2014, nació beyondBeanie (bB). Su lema “Luce un bB. Cambia una vida”.
La empresa basada en Suiza trabaja con artesanos bolivianos para vender gorros hechos a mano, maletas y ponchos a nivel global en línea y en tiendas en Suiza, Sudáfrica y Reino Unido. La empresa no sólo brinda un trabajo sustentable para los artesanos, también apoya a los niños empobrecidos en Bolivia.
Cada gorro vendido compra cinco comidas escolares. Cada poncho compra un uniforme escolar y cada maleta compra un conjunto de suministros escolares. Los brazaletes, su más reciente adición, ayudan a brindar cuidado dental. La empresa hace envíos a todo el mundo y ahora trabaja en su expansión a Estados Unidos, Canadá y Australia.
“Me encantaría que bB siga con su crecimiento como una marca de moda social que mantiene el impulso para los artesanos y ayuda a los niños en necesidad”, dice Álvarez, que trabajó para una empresa de tecnología en Suiza antes de comenzar su compañía. “Mientras seguimos con nuestro crecimiento, me encantaría que bB ayudará en otras áreas como salud materna y construcción de proyectos de agua potable, y no solo en Bolivia, también en otras partes del mundo”.
Mientras viajaban en La Paz, él y Lucero fueron conmovidos por las adversidades que enfrentan los artesanos, muchos de ellos, mujeres indígenas que se movieron a la ciudad para vender artículos de lana para ayudar a sus niños. Muchas veces, cuando las madres trabajan, los niños también lo hacen, recorren las calles para vender dulces, lustrar zapatos y pedir dinero a los turistas.
Lucero, que dejó en pausa su carrera en arquitectura, supervisa la producción en Bolivia, donde ella diseña prototipos y se asegura que los artesanos firmen a mano sus productos para ayudar a crear una conexión entre ellos y los consumidores. También está en contacto con un centro infantil en Cochabamba donde beyondBeanie apoya a 38 huérfanos con fondos para comidas y suministros escolares.
Para manejar su empresa global, ella y Álvarez utilizan Microsoft Office para mantenerse organizados y Skype para conectarse entre países, equipos y zonas horarias. “Skype es una increíble tecnología de Microsoft”, comenta Álvarez. “Paty y yo lo utilizamos todos los días”.
El arduo trabajo lo vale, comenta él, porque impulsa a otros a vivir una vida mejor.
“Mi sueño para bB es seguir con el desarrollo de nuestra marca social, seguir con el establecimiento de asociaciones con organizaciones con una ideología similar y mantener la promoción del bien social, todo mientras educamos a los consumidores e impactamos otras vidas”, comentó Álvarez a la red social Horyou.
Para conocer más sobre Álvarez, Lucero y beyondBeanie, vayan a la página de Instagram de Microsoft, una celebración de gente que rompe fronteras, consigue sus metas y #HaceMás (#DoMore) cada día.
