Por Rosalba Mackenzie
Río de Janeiro es mundialmente conocido como la Cidade Maravilhosa (Ciudad Maravillosa). Alberga íconos como el Pan de Azúcar, la estatua del Cristo Redentor (una de las siete maravillas del mundo moderno), las playas de Copacabana, Leblon e Ipanema, el estadio Maracanã, el Parque de Tijuca (el mayor bosque urbano del mundo) y la isla de Paquetá. Es famoso también por la música que parece recorrerlo como el viento, sobre todo durante las fiestas de fin de año en Copacabana y la celebración del Carnaval, que es la más grande del mundo según el libro Guinness de los récords. Además, este año se convierte en la primera ciudad olímpica de América del Sur.
Pero Río tiene otra cara. En la favela de Rocinha, al sur de la ciudad, fue erigida la Escuela Municipal André Urani, en 2011, después de que el Ministerio Municipal de Educación recuperara la zona, pues había sido tomada por la delincuencia y el narcotráfico. En esta escuela nació el primer Ginásio Experimental de Novas Tecnologías Educacionais (Escuela Experimental de Nuevas Tecnologías), también conocido como GENTE: un proyecto para escuelas públicas que comenzó a desarrollarse en 2012, en el que el centro del proceso de aprendizaje son los alumnos mismos, no los docentes. La docencia se convierte aquí en mentoría y, por lo tanto, en una herramienta más en la construcción del conocimiento.
Al ingresar a la escuela, los alumnos son sometidos a un examen diagnóstico para evaluar el conocimiento con el que cuentan hasta ese momento y compararlo con el que deberían tener. De esta forma, tanto los jóvenes como los mentores saben en qué áreas deben enfocarse para impulsar el proyecto de vida del alumno.
Pero el aprendizaje en esta escuela no se concentra únicamente en la parte académica, sino también en el desarrollo de habilidades sociales y emocionales, mediante la realización de proyectos transdisciplinarios y colaborativos donde los alumnos analizan datos reales, trabajan en grupos y actúan como agentes transformadores de sus realidades. Este enfoque integral y personalizado ha transformado por completo la experiencia del aprendizaje: cada estudiante crea su propio itinerario formativo y mediante una evaluación digital y adaptable se monitorea lo que el estudiante ha aprendido y en qué puede mejorar.
Este modelo ha modificado no sólo la postura de docentes y alumnos frente al aula de clases, sino hasta el concepto de aula: como en GENTE el alumno es el protagonista, se han creado espacios más amplios y abiertos, que estimulan el trabajo colectivo de alumnos y profesores. El diseñador Jair de Souza y el Grupo do Rio, firman el proyecto de ambientación y programación visual de la escuela.
Además, cuentan con clases digitales de Educopédia, una plataforma en línea de colaboración de clases digitales. Aquí, alumnos y profesores pueden acceder a actividades auto-explicativas a través del juego y práctica en cualquier lugar y a cualquier hora. Son videos, animaciones, textos, podcasts, juegos y adivinanzas que siguen una metodología predefinida. Creado por la Secretaría Municipal de Educación, la plataforma va a transformar la enseñanza más atractiva y motivadora para los adolescentes e instrumentalizar el profesor.
En la biblioteca digital de Educopédia el alumno tiene acceso a libros en formatos innovadores y contenidos interactivos. Además, profesores y alumnos pueden tener sus producciones escritas, almacenadas y compartidas con otros usuarios.
Hoy en día, GENTE es una de 28 escuelas experimentales que forman parte de la red municipal de Río, todas ellas, a su vez, son parte del proyecto “Escuelas del Mañana de Río de Janeiro”. Sin embargo, GENTE es la única que cuenta con un programa de inmersión absoluta de tecnología: tabletas y teléfonos inteligentes son parte de los útiles escolares.
Esta es la otra cara de Cidade Maravilhosa: la lucha interna por formar individuos integrales, mediante la combinación del desarrollo de sus habilidades cognitivas con la consciencia cívica, ambas armas indispensables para enfrentar los retos de la juventud latinoamericana.