Anunciada como la consola más poderosa del mundo, la Xbox One X marcó la entrada de Microsoft en los juegos en 4K y fue lanzada con celebraciones en todo el mundo.
Diseñado para proporcionar una experiencia más realista e inmersiva, el dispositivo, que rompió récords en ventas anticipadas, era un 40 por ciento más potente que cualquier otra consola y ofrecía tiempos de carga más rápidos y una claridad superior.
Un número creciente de desarrolladores lanzan juegos de Xbox “mejorados” que aprovechan los avances de la nueva consola para ofrecer mejores texturas, audio y visuales.