“Lo que pagas es lo que recibes”. Esta frase para mí es una gran verdad y les voy a explicar por qué. En específico, en la industria de TIC (Tecnologías de la Información y Comunicaciones) es algo muy común encontrar alternativas a soluciones y servicios sin costo alguno. Sistemas de transmisión de películas, descarga de música, descarga de software y un largo etcétera pueden ser encontrados si uno le dedica el tiempo a buscarlos.
Mucha gente decide no pagar una licencia de software y busca una alternativa “gratuita” para realizar alguna tarea específica. Y pongo entre comillas la palabra ‘gratuita’ porque al final, muchas veces se paga más por esa descarga. Tal vez un software gratuito pueda ser una solución inmediata a no pagar una licencia de un software completo, pero nos arriesgamos a que en el proceso de descarga, el software venga acompañado de malware que infecte nuestro equipo, además de que es probable que si tenemos algún problema de funcionamiento, no contemos con el soporte adecuado para resolverlo y no contemos con funcionalidades completas.
Y no estoy en contra del software gratuito. Hay desarrolladores con bastante talento que crean soluciones que pueden ser modificables y se pueden implementar en una plataforma “cerrada” sin ningún problema. La cuestión es buscar una solución alterna y gratuita para evitar pagar por un software o una solución que traen consigo miles de horas hombre en desarrollo y fuertes inversiones en investigación que generan un producto completo, seguro, y con soporte en caso de alguna complicación. Tal vez la comparación sea muy drástica pero sería como conseguir una medicina para tratar una enfermedad que estuviera hecha al momento, en un garaje, y que se ofreciera de manera gratuita, sin la preparación adecuada.
Office, por mencionar un ejemplo, es un software de productividad completo, seguro y con el soporte necesario para que el usuario haga las cosas que tiene que hacer sin preocuparse por cuestiones ajenas a las tareas que tiene que realizar. Tiene funcionalidades completas, se actualiza de manera automática y la verdad, para todo lo que ofrece y lo que nos permite hacer, su costo no es inaccesible. Además, hasta cierto punto es abierto pues uno como usuario puede enviar comentarios sobre lo que nos gusta y lo que no y el grupo de Office toma en cuenta las opiniones recibidas y realiza ajustes sobre la marcha para que los consumidores se sientan a gusto y cómodos con el software.
¿Qué se puede hacer con un software pagado como Sway? Vean este video y un ejemplo de un Sway:
Si deciden no pagar por una licencia de cualquier software y descargan una solución gratuita, el riesgo que corren es mucho y como consumidores, creo que no tenemos el derecho de reclamar un servicio completo por algo que obtuvimos de manera gratuita. Por eso abrí mi columna con esa frase, si no pagamos, no podremos recibir algo completo, seguro y confiable.
Yo confieso que alguna vez probé utilizar software sin pagar licencia y la verdad no lo vuelvo a hacer. Además, gracias a mi trabajo he podido conocer a fondo la cantidad de personas y tiempo que se invierte en la creación de los programas que utilizo a diario y en verdad es increíble todo lo que se investiga, prueba y desarrolla para que podamos tener en nuestras manos un producto terminado, que funciona como queremos que funcione y nos permite trabajar y ser más productivos.
Tal vez escrito por mi les suene a mención pagada, pero en verdad, los invito a que prueben pagar por software y/o soluciones, la diferencia es enorme. Recuerden que no es lo mismo un producto desarrollado por cinco personas que copian características que salieron hace 5 años, a un producto desarrollado por cientos de personas, con millones de dólares invertidos en investigación y desarrollo con características y funcionalidades nuevas, que les permitirán ser más productivos.