Tres aprendizajes que me llevé durante mi reciente visita a Latinoamérica



Por: Petter Galli, Director de Comunicaciones Ejecutivas en Microsoft

Como muchas regiones en el mundo, América Latina tiene retos y oportunidades enormes. Al entender esos retos e invertir de manera estratégica en las oportunidades, los negocios estarán mejor posicionados para ser exitosos y ayudar a brindar un futuro más fuerte a la región.

Mi reciente visita – en específico a Brasil, Argentina y México – comprobó que la resistencia y la innovación significan trabajar con lo que se tiene, mientras se empuja una reforma de manera sólida. Aquí les comparto 3 cosas que me llevé de mi viaje.

  • La innovación en tecnología está liderada por jóvenes apasionados

Los jóvenes en Latinoamérica tienen una gran cantidad de potencial. Sin embargo, mientras que 40% de la población todavía se clasifica como “joven” por el Banco Mundial, la tasa actual de emprendimiento en la región es de sólo 18.5%

Es crítico apoyar y guiar a las mentes jóvenes emprendedoras de la región y vemos una oportunidad significativa para ayudar a que los jóvenes entren y se desarrollen en el sector tecnológico. En México, 65 mil nuevos profesionales se gradúan cada año de escuelas técnicas y de ingeniería en todo el país. Los Microsoft Technology Training Centers están enfocados en equipar a cada vez más gente con las habilidades y certificaciones que necesitan para convertir la tecnología en una carrera.

El progreso es evidente en áreas como la Ciudad de México, donde una fuerte combinación de talentos tecnológicos bilingües y tecnológicos ha comenzado a llamar la atención e inversiones de los principales jugadores globales. El número de ingenieros, científicos cuantitativos sociales y programadores no tiene paralelo. El progreso de nuevas empresas e incubadoras en Guadalajara, a seis horas de la Ciudad de México, le ha ganado la reputación de ser el Silicon Valley de México.

Pero todavía se puede hacer más. Más científicos e ingenieros significan un posible mayor crecimiento tecnológico. El entusiasmo de la región por ese progreso se muestra a través de los 17 mil estudiantes que compitieron en nuestra Imagine Cup 2014 en Brasil, un reto anual para atacar los más grandes problemas mundiales a través de la tecnología. En Argentina, Microsoft es una de las siete organizaciones que son parte de Comunidad IT, una organización no gubernamental enfocada en encontrar soluciones al problema del desempleo en los jóvenes.

  • El futuro de la región depende del éxito de sus PyME

En Brasil, cerca del 80 por ciento de todas las empresas son PyME. El pronóstico 2013 de OECD para Latinoamérica resalta el potencial para las PyME de jugar un papel importante en fomentar el crecimiento y el cambio estructural.

TechNavio, analista global de tecnología, estima que el mercado de nube en Latinoamérica crecerá de manera anual 26.1 por ciento en los próximos cinco años. De acuerdo con IDC, el mercado brasileño de cómputo en la nube pública generará 800 millones de dólares en ganancias en 2015. Lo que está claro es que las empresas que se han adaptado bien al uso de tecnologías como la nube son capaces de encontrar soluciones prácticas en tiempos difíciles y hacer más con menos.

Una empresa así es Mural.ly, una nueva empresa de tamaño pequeño con sede en Buenos Aires que provee un tablero de anuncios gratuito para que la gente comparta contenido e ideas de negocios. Se expandió de 10 mil a 350 mil usuarios en dos años y utilizó Azure para escalar esa demanda. De manera similar, la Fundação Instituto de Administração en Sao Paulo redujo el costo de sus cursos de negocios a los estudiantes al utilizar la nube para lidiar con la fluctuante demanda de cursos.

  • Las reformas deben seguir para que los negocios prosperen

Cuando las empresas modernas y dinámicas prosperan, la vida de toda la población mejora a través de las exportaciones y la creación de empleos.

En México, una nueva clase media ha emergido para ayudar a empujar esa reforma. Una clase que es más joven, más educada, con mayor capacidad económica, más saludable y más capaz de integrar a la mujer al empleo que cualquier otra generación previa.

Pero 40 por ciento de la población aún vive debajo de la línea de la pobreza y, en general, toda la región tiene que progresar a través de sacudirse su pasada reputación de inestabilidad política y economía contraída por regulación, y una economía informal que es muy visible.

Se necesitan políticas sociales que cuidan de mejor manera a la gente. Esto incluye utilizar tecnología para mejorar servicios como la salud y la educación. El sector educativo en Brasil, por ejemplo, ha mejorado la administración de escuelas y universidades y motiva el uso de tecnología como herramienta colaborativa en el aula.

Las sociedades en Latinoamérica han mostrado que están listas para la reforma. Estoy emocionado por el gran potencial que he visto en los jóvenes, pequeñas empresas y nuevos negocios con los que trabajamos en esta parte del mundo y espero que la tecnología se muestre como un verdadero habilitador para el crecimiento en esta siempre cambiante región.

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