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Fotógrafa trotamundos conecta a las personas con la vida salvaje

El último lugar en el que Kristi Odom esperaba estar era en una multitud.

Tímida por naturaleza, estudió ingeniería eléctrica y computacional en Georgia Tech, pero una pérdida en su familia llevó a ambientes inusuales (para ella): juegos de futbol americano y conciertos. Y durante esos momentos, encontró lo que haría por el resto de su vida.

“Siempre he sido cercana a mi familia, muy cercana a mi abuelo. Y cuando falleció, me dejó su cámara. Comencé a tomar fotos para sentirme cerca de él y recordarlo”, comenta Odom. “Y me di cuenta que incluso al estar callada, podía tener una voz fuerte que iba muy lejos. Y la fotografía me sacó de mi caparazón. Me hizo menos introvertida y me puso en el medio de todo y me hizo darme cuenta de que tenía una voz que podía compartir”.

Pero fue la fotografía de naturaleza la que en verdad la enganchó. Odom fue de buceo con su padre, donde utilizó cámaras para capturar tiburones, escuelas de peces y otras criaturas submarinas.

La fotografía la ha llevado por todo el mundo – a seis de siete continentes, desde Australia Occidental a Sumatra y las Galápagos. Incluso la ha llevado cara a cara con la vida salvaje que tanto ama capturar en cámara – en ocasiones, demasiado cerca, como cuando un oso la cargó en Alaska.

Uno de sus lugares favoritos es Indonesia, donde tuvo un encuentro cercano – en el buen sentido – con tiburones ballena.

“Nadaba sola con cinco o seis de ellos a la vez por horas. Y fue increíble”, menciona. “Fue maravilloso, porque tuve esta oportunidad única. Con mis antecedentes en matemáticas, siempre me han atraído los patrones y la luz. Noté que la luz se reflejaba alrededor de mi cuerpo. Y podía controlar esas líneas y quería que esas líneas se encontraran con los puntos de los tiburones ballena. Y tuve esta oportunidad única donde todo se alineó y luego vi la toma en mi alojamiento en la noche y comencé a llorar. Dije ‘Sí, esta es’”.

Premiada foto de un tiburón ballena. (Foto por Kristi Odom)

Esa foto ganó el premio Nature’s Best Photography y el Smithsonian la exhibió por un año desde octubre de 2017.

“Aquí estoy, esta persona tímida e introvertida que de pronto, tenía una imagen que es vista en un museo que tiene casi 10 millones de visitantes al año”, comenta Odom.

Ahora, la introvertida va a conferencias y habla frente a miles de personas. Lidera talleres enfocados en la conservación. (En 2020, serán en Bolivia, Kenia y Nueva Zelanda). Además del Smithsonian, ha tenido una imagen en Times Square, en proyección en conferencias como CES y Photoplus, y en varias publicaciones que incluyen a Forbes, la revista Outside, People.com, Rollingstone.com, el noticiero de ABC y en Nikon.com. también ha recibido más de 60 premios internacionales de fotografía, incluidos dos de Nature’s Best Photography, 26 Fearless Photography Awards y más de 30 premios de Wedding and Portrait Photographers International, lo que le ha otorgado el grado de Master de WPPI.

Y ahora ha expandido sus habilidades al abrir una nueva rama de su compañía, gracias a las cada vez más rápidas tarjetas gráficas y procesadores en las laptops.

“Comencé a hacer trabajo en video durante el último año y medio, y esto es por la tecnología que ahora está disponible. En la actualidad, mi estación de trabajo es la ASUS ZenBook Pro Duo, y esta laptop abre tantas posibilidades”, comenta. “No necesito una computadora grande de escritorio para hacer mi edición de video. La puedo hacer en el camino, y puedo tener mi línea de tiempo en la parte inferior y aun así tener todo este espacio para ver la calidad de mi video. Puedo editarlo y no tengo que cambiar entre pantallas. Tener un área mayor para poder ver mis fotos y videos y tener todo en este segundo monitor, ha cambiado el juego para los creadores que están en movimiento”.

Para Odom, el segundo monitor 4K alojado justo por encima del teclado hace de la edición de video en movimiento “muy accesible y factible”.

Fotografía de Kristi Odom

Algunas de las fotos de Kristi Odom, tomadas en Sudáfrica, Borneo y Alaska.

“Poder editar en un avión o en mi casa de campaña, y poder unir una pieza a la altura de la pasión del momento me ayuda a ponerle emoción a mi trabajo”, comenta Odom. “Mi meta principal en la vida siempre ha sido conectar a la gente con la vida salvaje de manera emocional, mostrar a la gente la belleza que hay en los animales y la belleza que hay en este planeta que tenemos. Y espero que a través de visuales, pueda hacer que la gente se preocupe más por este planeta”.

La velocidad es vital, ya que ella siente que es importante compartir sus imágenes con el público en sus varios canales sociales tan pronto como pueda.

Odom también es embajadora de Nikon, lo que le da “una voz más fuerte y más oportunidades” a través de conferencias y de los canales de transmisión en vivo de Nikon. Ella también espera “inspirar a otros para que conozcan el poder de la fotografía y para que crean que pueden hacer un cambio”.

Hacer videos juega un papel importante en esto.

“Siempre me ha gustado la fotografía porque te permite tomar una fracción de segundo y conservarla para siempre. Comencé a jugar con el video en cámara lenta cuando Nikon sacó las cámaras sin espejo. Me gustó que la cámara lenta toma el tiempo y lo altero, no del todo quieto, pero te deja ver detalles que tu ojo pudo haberse perdido: desde el patrón en las alas de una abeja en pleno vuelo o la textura de la trompa del elefante mientras bebe agua, el tiempo se ralentiza y revela esta belleza indescriptible”.

Elefante africano fotografiado en el Parque Nacional Tsavo East, Kenia 2019. (Foto por Kristi Odom)

Comenzó a poner cortos en video en sus canales de redes sociales, lo que llamó la atención de Nikon. La comisionaron a que hiciera una pieza en video que mostrara las capacidades de cámara lenta de las nuevas cámaras sin espejo.

“Nunca pensé que haría video, porque siempre pensé que se necesitaba una gran producción – cardanes, plumas, cámaras pesadas, grandes monitores y computadoras de escritorio. Ahora no necesitas todas esas cosas. Puedo sostener mi cámara y disparar en 4K o en cámara lenta, luego editar en una laptop mientras estoy en el campo. Mi trabajo en video ha sido tomado y editado sólo por mí en mi laptop ASUS. Es una época en verdad emocionante para ser una persona creativa y entrar en la creación de videos”.

De manera reciente, Odom fue a Sudáfrica, donde pudo utilizar todos los beneficios de su nueva laptop ASUS, incluida la nitidez, claridad y resolución de pantalla – cosas que importan en especial a los fotógrafos. Al utilizar todas estas herramientas, ella documentó a una familia de rinocerontes que se encuentran en un grave peligro de extinción – algo que ella nunca había visto.

Familia de rinocerontes en Sudáfrica, diciembre de 2019. (Foto por Kristi Odom)

Otro extra del dispositivo – su capacidad de mantenerse fresco y operar en temperaturas extremas, como las condiciones de más de 100 grados Fahrenheit ( 37° C) en Sudáfrica y Australia, donde ha vivido por cinco años.

“He tenido computadoras en el pasado que se sobrecalentaba cuando trataba de trabajar. Y no hay un espacio con aire acondicionado al que pueda ir para enfriarlas. Y en ocasiones, cuando el clima era muy caliente, tuve que dejar mi computadora hasta que la temperatura fuera la correcta”, menciona Odom.

En su reciente trabajo a Sudáfrica, lideró a un grupo que iba de los 8 años a personas mayores para tener una “experiencia en la naturaleza que cambiaría sus vidas”. Odom comenzó en Cape Town para fotografiar pingüinos y focas en peligro de extinción. Luego se unió al grupo para un safari en los parques South African Wildlife, para finalizar el día de navidad en Victoria Falls.

Esta variedad de condiciones valen por las oportunidades que le ofrecen.

“Cuando veo a través de una cámara es como si todo el mundo desapareciera y sólo veo al sujeto”, comenta. “Y he visto cosas que no puedo describir debido a su belleza. Pero una cosa que vimos (en el viaje a Sudáfrica) que en verdad me dejó boquiabierta fue un rinoceronte de 3 años. Y ver a los jóvenes y ver a un pequeño rinoceronte entre su familia, me hizo llorar: una nueva vida en una especie que poco a poco desaparece. Este planeta tiene eso, y es hermoso y vale la pena amarlo y vale la pena cuidarlo”.

Sigan a Odom en Instagram y Facebook.

Foto principal: Un león adormilado despierta en Karongwe Game Reserve en Sudáfrica, diciembre de 2019. (Foto por Kristi Odom)